OBJETIVOS DE LA LITERATURA INFANTIL
- Incentivar la creatividad (Estimula la imaginación).
- fomentar el desarrollo de la lecto-escritura.
- fomentar destrezas tales como:escuchar, conversar, opinar, respetar la perspectiva de otros.
- Ampliación del léxico (Adopción de nuevas palabras).
- educar.
- divertir.
- compartir.
- comunicarse.
- ser reflejo de la sociedad.
BENEFICIOS DE LA LITERATURA INFANTIL
Todas las culturas han creado su
propia literatura para interrogarse sobre el mundo y han procurado
facilitar a los niños/as el acceso a ella, para ayudarles a encontrar
sentido a la vida.
Desde que nace, el niño/a
recibe formas poéticas y de ficción -contenidas fundamentalmente en
canciones y narraciones- a través de los adultos, los libros infantiles y
los medios audiovisuales. Este contacto, continuo y prolongado, le
permite –gradualmente- formar expectativas sobre qué es el texto escrito,
dominar las convenciones literarias y aprender a interrelacionar su
experiencia vital propia con la cultural transmitida por la palabra.
Evidentemente, familia y escuela
tienen un papel importante como intermediarias en este proceso. Por lo
tanto, deben conocer cuál es la literatura recomendada, de calidad y
asequible a las primeras edades y cómo ponerla al alcance de los
niños/as.
La recepción de literatura
desde la primera infancia es la actividad más beneficiosa para conseguir
el éxito de los niños/as en su acceso a la comunicación escrita, y un
instrumento privilegiado para ayudarles a construir su identidad y la
del entorno que les rodea. Por ello, las aulas de Educación Infantil y
Primaria deben ser lugares que aseguren el contacto vivo y placentero
entre niños/as y libros.
CONCLUSIÓN
La literatura infantil en edades tempranas
debe generar, principalmente, placer y ayuda al autoconocimiento y la
interpretación del mundo que rodea al niño/a. Si esta función se cumple, es más
probable que ese niño/a desarrolle de forma natural un gusto por las obras
literarias conforme vaya creciendo.
Para que un maestro/a pueda ser un buen
mediador entre la Literatura infantil y los niños/as, debe alcanzar una
sensibilidad hacia la “verdadera” literatura infantil, y saber diferenciarla de
aquellas producciones que, aun queriéndose llamar literatura, son, en realidad,
textos escritos al servicio de las didácticas que, en ningún momento persiguen
provocar en el receptor la admiración, el deleite y la razón del esfuerzo por interpretar
el texto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario